Llegó el momento, ya no puedes retrasarlo más y es que unas merecidas vacaciones en familia son más que necesarias. Si es la primera vez que os vais de viaje con vuestro pequeño y os inundan las dudas sobre qué deberíais meter en la maleta, no desesperes, seguro que es más sencillo de lo que te imaginas. Hoy te damos una serie de consejos, puntada a puntada, para que lleves lo necesario e imprescindible y que no parezca que te mudas de casa cada vez que sales de viaje con tu bebé. A partir de ahora, preparar la maleta para viajar con bebés será coser y cantar.
Lo primero que debes saber es con qué vas a contar en el lugar de destino, ya que así no hará falta que lleves todas esas cosas. Ponte en contacto con el alojamiento de vuestras vacaciones y pregunta qué tendrán disponible para tu bebé en vuestra habitación.
Repasemos los elementos que es bastante habitual que puedas encontrar en el lugar en el que te alojes:
- La cuna es un ejemplo claro, si la habitación en la que vais a dormir incluye una cuna para tu bebé, no tendrás que llevar una cuna de viaje, ni ropa de cama. Aunque sí aconsejamos que te lleves una mantita por si las noches refrescan.
- La bañera. Comprueba que dispondrás de un lugar cómodo para bañar a tu bebé. Si no vas a tenerlo o dudas sobre el lugar disponible, hazte con una bañera hinchable, que no pesa ni ocupa casi espacio y hará las delicias de tu pequeño en el momento del baño.
- La trona para la hora de la comida. Es ya muy frecuente que en hoteles y restaurantes dispongan de tronas o asientos adaptados para bebés a la hora de sentarse a la mesa. Aunque también lo puedes tener en formato de viaje, fácil de transportar y que ocupa poco espacio, es un bulto menos.
Hasta aquí los elementos más voluminosos y de los que es fácil que te puedas librar de trasladar, porque los facilita vuestro alojamiento.
Ahora llega el momento de hacer tu lista de imprescindibles para no llevarte ningún sobresalto y tener que salir corriendo a la farmacia o la tienda de puericultura más cercana.
Imprescindibles para llevar en la maleta cuando vas a viajar con bebés.
- Su juguete favorito o ese objeto que le relaja a la hora de quedarse dormido. Evita que extrañe su hogar y todo aquello a lo que está habituado y haz un hueco en la maleta para algunos de sus juguetes o aquel elemento con el que suele dormir plácidamente.
- Mochila portabebés. Esto dependerá mucho del tipo de viaje que vais a realizar, pero si tenéis previsto alguna actividad de senderismo por una ruta ligera y agradable, puede ser interesante que te hagas con una mochila portabebés para estos paseos por caminos donde el cochecito no circularía muy bien. Es una opción cómoda para tu bebé y sin riesgos de estropear alguna rueda de tu cochecito.
- Elementos de aseo. No es habitual que en los hoteles dispongan de productos de higiene para bebés; casi seguro que tendrás que llevarte el champú y gel que utilizas de forma habitual y a los que tu bebé está acostumbrado. Si el tamaño de los recipientes que tienes en casa es muy grande, igual te compensa comprarlos al llegar a tu destino vacacional. No olvides meter en el neceser su crema hidratante y su cepillo.
- Ropa. En este caso te recomendamos contención. Seguro que quieres llevar todos esos modelitos tan monos y cómodos que tienes en el armario y que le quedan fenomenal a tu pequeño, pero no hace falta que llenes la maleta. Calcula un conjunto y una muda de repuesto para cada día, ya que los bebés pueden mancharse a menudo. Si vais a estar fuera muchos días, calcula la ropa para una semana y busca la manera de lavar lo que te vaya haciendo falta. No olvides un par de pijamas y un gorrito para el sol o el frío según la época del año. Una mantita, aunque sea en verano, puede venir también muy bien por si refresca de repente.
- Comida y bebida. Aquí debes tener en cuenta el desplazamiento y lo que tendrás que llevar para el trayecto y, además, los días que estaréis fuera de casa. Para el viaje incluye cosas que le puedan entretener por si se os hace tarde y tenéis que esperar un poco para poder a darle de comer. Si ya puede tomar galletas, pan o fruta, son una alternativa ligera que le entretendrá mientras espera el momento de la comida o la cena. Para la estancia en vuestro destino de vacaciones valora qué debes llevar, según sea la zona que habéis elegido. Es probable que tengas que llevar la leche de continuación y los cereales para el biberón y algunos potitos de fruta para las meriendas o de carne, pescado y verduras para comidas y cenas, que te pueden sacar de un apuro. Puede ser interesante llevar un calienta biberones, ocupa poco y puede ser muy útil tener uno. Si viajáis en coche, hay opciones en el mercado que se pueden enchufar a la conexión del automóvil, muy útil para el desplazamiento y las excursiones.
- Kit de cambio de pañal. Pañales, cambiador, toallitas, crema y una muda completa para el trayecto y cada vez que salgáis a pasar el día fuera.
- Botiquín de viaje. Los más pequeños pueden ponerse malitos cuando menos te lo esperas y como bien sabéis los padres, la fiebre suele aparecer al final del día o incluso ya de noche. Lleva un pequeño botiquín para el viaje con antipiréticos y analgésicos infantiles, un termómetro y un antiséptico. Si ya camina unas tiritas y una crema infantil para los golpes también serán buenos compañeros de viaje.
- Documentación del bebé. Es importante llevar siempre la documentación médica del bebé por los imprevistos que puedan surgir.
¿Cómo lo ves? ¿Te sigue pareciendo misión imposible salir de viaje con tu bebé? No lo dudes, sigue nuestros consejos y disfruta de viajar con los más pequeños, es una experiencia muy positiva para toda la familia.